Sin duda uno de los juegos más difíciles de los que he oído hablar jamás es el Ear Pull, una antigua tradición inuit donde los competidores ponen a prueba la fortaleza de sus orejas.
Ear Pull es tan simple como doloroso. Dos concursantes se sientan uno delante del otro con sus piernas abiertas y entrelazadas, colocan una cuerda alrededor de uno de sus oídos, y cuando el árbitro de la señal empiezan a tirar hacia atrás hasta que la cuerda se suelte de una de las dos orejas.
Puede sonar horrible para algunos de ustedes, pero el Ear Pull es un deporte practicado y registrado en los juegos Olímpicos Esquimales. Se puede ver la cara de los concursantes arrugarse del dolor, sus orejas se ponen de color rojo brillante e incluso algunos de ellos necesitan ser suturados luego de la competencia. ¿Te atreverías a jugar?.
